La verdad detrás de las señales verdes que acaban de aparecer en las carreteras españolas

Uno de los sistemas fundamentales que hay para el mantenimiento de la seguridad en la carretera son las señales de tráfico. Pese a que los conductores sí que tienen conocimiento de ellas y se saben de memoria las más habituales, se olvidan de las que están presentes de forma habitual en la carretera. Esto hace que cuando llega una señal nueva, les cueste más conocerla. El sistema en este sentido es simple, puesto que existen 3 formas, la triangular (significa peligro), la circular (prohibición) y la cuadrada (información/orientación). El rojo es el color que suele acompañar casi siempre a dichas señales.

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Hace pocas fechas, se pudieron ver en Francia una serie de señales parecidas a las que marcan la velocidad máxima, pero donde el borde es verde. Por lo general, dichas señales cuentan con el borde de color rojo, que normalmente es símbolo de peligro, de aquello que está prohibido. ¿Qué significa el verde entonces? Pues su significado es el de recomendación. Dichas señales van a indicar la velocidad que se recomienda para poder garantizar la seguridad en algunos tramos de la carretera, pero no va a ser límites obligatorios que tengas que seguir de cara a evitar las multas. Estas señales nuevas se ha visto primero en la red viaria francesa y después se va a extender a otros sitios.  Una información que debes tener en cuenta, puesto que así te vas a evitar bastantes sustos en este sentido. Además, vamos a seguir contándote más cosas al respecto sobre el tema.

Una larga historia sobre este tema

A partir de la Convención de Vena que tuvo lugar en 1968, pasó a establecerse un sistema de señalización uniforme en Europa para que la conducción fuera semejante en la totalidad de países. El caso es que como todavía no se incorporó al Reglamento General de Circulación en nuestro país, el cambio en los bordes rojos de las señales relativas a la velocidad a verde, pueden llegar a confundirte y que debas prestar una mayor atención.

En este sentido, un problema que sucede es que hay zonas en donde se coloca, tanto la propia señal clásica con bordes rojos relativa a la prohibición como la de brotes verdes de recomendación, lo que termina generando una gran confusión.

A nivel legal, la que prevalece es la de bordes rojos, lo que acabe por generar una gran confusión.  En nuestro país, la jerarquía de las señales de tráfico es: primero, indicaciones de los agentes, después señales temporales, semáforos, señales verticales y finalmente, marcas viales horizontales.

Una señal que pude suponer muchas multas

El próximo mes de septiembre se cumple un año desde que el Tribunal Constitucional avalara la sentencia donde el propio Tribunal Supremo permitía a los consistorios el diseño de las propias señales de tráfico en su territorio.

Gracias a dicha sentencia, el Ayuntamiento de Madrid, fue el primero en usar señales de tráfico que se crearon por y para la propia ciudad. Lo que supuso un precedente a nivel legal en nuestro país.

En la AEA (organización de Automovilistas Europeos Asociados), lo que hicieron fue denunciar que dicha medida es un gran riesgo para la seguridad vial de muchos conductores, que al final se exponen a unas señales que se inventan los ayuntamientos.

De igual manera, desde hace escasos meses, fueron multitud de gobiernos municipales que hicieron el diseño de las señales de tráfico para regular varios parámetros circulatorios en la localidad.

Todo ello ha supuesto que muchos conductores no residentes en dichos municipios estén ante señales que no conocen que les pueden terminar ocasionando una multa.

Móstoles y las autoescuelas

La ciudad mostoleña es la segunda más habitada de toda la Comunidad de Madrid, después de la capital de España. Hablamos de más de 200.000 habitantes y también alberga, de la década de los ochenta, un Centro de Exámenes de la Jefatura Provincial de Tráfico.  Son miles los conductores que pasaron por sus instalaciones desde entonces para realizar el examen del carnet de conducir.

Todo ello ha terminado provocar que se haya visto lleno de centenares de vehículos de autoescuela en avenidas y calles, tanto para la preparación del examen de conducir como para hacer la misma prueba.

Dicha situación, unida al aumento de la población que ha tenido Móstoles, obligó al consistorio a que tomase medidas y prohibir en bastantes zonas la circulación de dichos coches con alumnos.

Todo esto hizo que pusieran en marcha una señal de prohibido a las autoescuelas de hacer prácticas en zonas del municipio.

Su fondo es amarillo y tiene una circunferencia con el borde rojo, fondo blanco y «Autoescuelas» en el interior. Se prohíbe totalmente en el barrio de La Princesa, Los Rosales y El Soto, además de algunas calles del centro mostoleño.